Continuamos con el arte del tacto y la exploración erótica de pies a cabeza.
El cuello y los hombros
Zonas reconocidas desde siempre como erógenas, de las favoritas en todas las culturas. El cuello en su unión con las mandíbulas y la clavícula suele percibir más el roce de unos dedos. Colocar la mano completa en la nuca brinda seguridad psicológicamente. Sí, acertaste, porque recuerda cuando nos cargaba nuestra madre.
Sico®ejercicio
1. Para él: toma una postura de espaldas a él mientras te penetra, como montada de frente a sus pies. Arquea tu espalda y pídele que lleve el ritmo de la penetración sujetándose de tus hombros. Toma sus manos y recórrelas hasta la clavícula. No se trata de lo que sienten tus hombros sino tu cuerpo cuando él toca tus hombros.
2. Para ella: hazle el amor de frente, sentado en flor de loto (de chinito) y ella montada “abrazándote” con las piernas. Pídele que te muerda (suavemente) en un hombro sobre todo cuando sienta que estás cerca de eyacular.
¿Quieres “redondear” la experiencia? Previo a penetrar coloquen un Sico Ring® en la base del pene y déjenlo vibrar.
La espalda
Una de las áreas más extensas y, por lo tanto, con grandes posibilidades. Muy sensible y conectada a centros nerviosos. Puede estar adolorida sin que lo percibamos. ¡Masajea!
Sico®ejercicio
1. Relaja para excitar. Ya sea sentado o acostado, pídele a tu pareja que respire profundo, coloca las manos en su costillar posterior y siente el movimiento de sus inhalaciones, acaricia, cosquillea toda la espalda y observa cómo su piel se va “poniendo chinita”, viaja hasta los brazos y codos. Continúa hasta las axilas. Recorre desde su cóccix hasta la primera vértebra con ambos pulgares a cada lado de la columna. Regresa. Al llegar al cóccix, frota en su terminación e inicio de la línea de las nalgas. Enviarás más sangre a la zona pélvica, la cual necesitará para erectar su pene o clítoris.
Las nalgas
Otras favoritas del erotismo; según algunos especialistas, nos fijamos en ellas porque nos recuerdan nuestro pasado primitivo cuando nos apareábamos únicamente en montura de macho sobre hembra. A cada lado de la línea divisoria, en ellas están un par de centros que ayudan a relajar el útero. En ellos, los puntos de estimulación que excitan la próstata y la producción de testosterona se sitúan alrededor del cóccix.
Sico®ejercicio
2. Descubre su textura con tu lengua y permítele sentir la rugosidad de ésta y las temperaturas con tu saliva. Haz un masaje lingual circular en el cóccix y sube. Da pequeños mordiscos y succiones con los labios. No olvides el pliegue que las une con las piernas.
Los dedos y las manos
Las yemas, en especial las del pulgar y el cordial, al ser succionadas con la boca, emulan el fellatio. Hay una conexión sensorial. Hay que acariciarlas para recordarles su máximo fin: conectarnos.
Sico®ejercicio
3. Dedos que se besan. Cuando estén haciendo el amor o besándose, en cualquier juego erótico, coloquen sus palmas una frente a otra y que sólo las yemas se toquen muévanlas y entrelacen los dedos, recorre cada una de sus falanges.
Abdomen, pelvis y pubis
La zona que nos aproxima adonde hacemos la magia suprema. Desde las costillas, el ombligo hasta la pelvis está cundido de sensibilidad.
Sico®ejercicio
4. Masaje pélvico. Con una buena cantidad de Soft Lube® Pleasure Plus®, coloca ambos pulgares en sus huesos de la pelvis y muévelos hacia abajo con un poco de presión, como si dibujaras con ellos un calzón. Llega hasta el pubis y con el resto de los dedos toca su entrepierna. Blofea con los genitales, no los toques aún.
El pene y los testículos
Hay que estimular el pene en espiral, rodeándolo. Presionando levemente para promover su erección. Hay que reeducarlo, enseñarle a sentir así como promover una eyaculación no controlada.
Sico®ejercicio
5. Los testículos, en su unión con el pene, ofrecen un área fascinante, así como el perineo, que es la vía para estimular la próstata, para hacerla vibrar y generar un orgasmo no eyaculatorio. Prueba colocando directamente en la zona un Sico Ring® muy bien lubricado con Soft Lube Pleasure Plus®. Sugerencia de Eros.
6. Juego de contracciones. La mejor manera de mostrarle a un pene nuevas dinámicas es a través del estímulo vaginal. Para ello, debes contar con suficiente fuerza del suelo pélvico ejercitándolo con Kegels. Pídele que te penetre y se quede inmóvil y presiónalo con tu vagina. Masajea. Cuanta más fuerza tengas más control tendrás e incluso podrás dar estímulo con diferentes “anillos vaginales”.
Aún nos faltan muchas zonas por descubrir, pero… exploraremos en el siguiente post.
¿Te perdiste la Primera Parte? Da clic Aquí
Todo muy rico y sabroso siga asi me encantan todos sus comentarios y sobre todo cuando se hase la practica,,es lo mejor