Según una encuesta realizada por la Universidad de Columbia, la mayor preocupación de las chavas (de toda edad) cuando comienzan a salir con un galán es que él pudiera ser infiel. La mismísima número uno, por encima de que el tipo pueda ser un holgazán, violento, chantajista, celotípico, en fin. La cosa es que ‘no me vaya a poner los cuernos’. Impresionante. Y no porque ‘si nos pusieran a escoger’ elegiríamos a un manipulador pero fiel, fiel como cisne, pero el que en muchas cabezotas femeninas la primera angustia que surja sea ‘Por favor no me engañes’, nos habla de nuestros bajísimos niveles de autoestima y altas dosis de miedo: heredados, agarrados por lo propia historia, aprendidos. Dicen que quien te quiere engañar lo hará aunque seas la mismísima efigie de la belleza, inteligencia, buena sazón, trigresa en la cama, con metas claras, madurez emocional, sagaz, decidida, exitosa. ¿Por qué lo hacen?
Nunca nos pondremos de acuerdo, hay especialistas que incluso afirman que la exclusividad sexual no es sustentable puesto que no somos una especie monógama (que socialmente fue empujada a ello). Quizás la monogamia vitalicia -con felicidad incluida y no como un suceso producto de un enorme fastidio y donde, no nos hagamos gueyes, claro que ha habido infidelidad- sea cada vez menos frecuente, porque la gente evoluciona y en dichos cambios las personas pueden no evolucionar juntas, los caminos se dispersan y fin de la historia; sobre todo porque hoy nos reconocemos con el derecho de terminar una relación cuando ésta ya no nos satisface, aunque se haya jurado ante el altar que estarían juntos forever and ever. Peeero, la monogamia temporal (tan larga temporada como sus madureces emocionales les permitan), sí la creo posible. Cómo no. Es una decisión, porque quien nos mueva el mecate siempre habrá; la diferencia la hace el libre albedrío.
Así es, nos han enseñado que debemos ser una especie monógama y se ha vuelto un valor dentro de las relaciones (para muchas, como vimos, el número uno), por lo tanto se convierte en una decisión. Cada quién vive las relaciones adaptadas a su ideología, se celabra la diversidad y así como hay quienes por libre albedrío y con toda fe y deseo conciente deciden ser ‘fieles’ o digamos monógamos por una temporada decidida, habrá quienes vivan de manera plena la poliamoría o las relaciones abiertas. Gran punto.
Pero volviendo a este temor femenino casi generalizado, a veces somos hilarantes, de acuerdo a esta misma encuesta, nuestro gancho más usado para ‘atrapar’ al potencial infiel es contarle una historia tristísima en nuestro pasado, en la cual fuimos devastadas por un tipo infiel (a veces puede ser cierta) y creemos (ilusamente, tal vez) que aunque él sea del tipo infiel se compadercerá ante senda historia trágica y jamás lo será con nosotras. ¿Se compadecerá si ya es su ‘estilo de vida’? Y hay que entrecomillarlo porque es una conducta, un comportamiento que sí, puede ser compulsivo.
Ahora que nos sentimos liberadas porque ya podemos votar, trabajar y ganar lo mismo, y el largo etcétera del pliego petitorio feminista, ¿no deberíamos comenzar a liberar nuestra cabeza? También elegir a un tipo que sabesss que es o puede serte infiel es una decisión. Libre albedrío. Elegir con inteligencia emocional, no sólo con el corazón enchocolatado de hormonas y de caletura o erotismo fantasioso.
No creemos lo que no está ahí, ni le demos permiso de existir cuando ya detectamos que hay un potencial. Por cierto, según una investigación, digo ya para cerrar, los hombres más inteligentes, con mayor coeficiente sexual, son menos infieles. Según un estudio del psicólogo Satoshi Kanazawa, psicólogo de la London School of Economics and Political Science, mientras más inteligente es un hombre, es menos probable que sea infiel. Afirma que mientras más evolucionados sean los hombres, es más probable que mantengan una misma pareja sexual. De acuerdo a su lógica, la monogamia es el resultante del desarrollo evolutivo: la promiscuidad sexual era necesaria en las sociedades primitivas, por la imperiosa lucha por conservar la especie debido a los altos índices de mortalidad. Según sus investigaciones y mediciones de coeficiente intelectual (CI) en una muestra de hombres, aquellos con mayor tendencia a tener muchas parejas sexuales simultáneas y ser infieles tienen un menor CI que quienes pueden mantenerse por periodos largos con una misma pareja sexual, reconocidos, según su teoría, como más evolucionados.
Las conclusiones de Kanazawa son el resultado del análisis de dos importantes bases estadísticas estadounidenses en las que se encuestó a miles de varones, adolescentes y adultos, sobre sus actitudes sociales. Del mismo estudio se colige que mientras más inteligente es la persona, es menos probable que crea en Dios o que tenga un punto de vista político conservador. De hecho, entre los adultos jóvenes americanos, los que se consideran «muy conservadores» tenían un promedio de Cociente Intelectual (CI) de 95; los muy liberales, de 106. Y en cuanto a los no religiosos, su CI promedio fue de 103; el de los creyentes, de 97.
En fin, conclusiones de este científico. Nada es regla. Pero resulta interesante.
Antes que nada felicidades por tu trabajo, por otro lado es genial saber que recomiendes que las chicas trabajen en su autoestima, yo en lo personal no soy celoso, prefiero dar lo mejor de mi con mi pareja dentro y fuers de la cama y si la tengo a gusto es muuuuuuy remota la posibilidad de que me sea infiel, a fin de cuentas la infidelidad como tu dices es una decision, no te obligan a hacerlo, mucho exito elsy, sigue tan bien como siempre
Ya me confundí, se supone que yo al no ser creyente soy inteligente (y lo soy y lo puedo demostrar). PERO, me dices al final que tengo baja CI….. no, no.
Acaso no puede haber una mezcla entre inteligente y desgraciado (por así decirlo)? bueno, cabe resaltar que cuando salgo con chicas JAMÁS les doy a entender que ellas con el amor de mi vida ni mucho menos les miento diciéndoles que soy suyo y de nadie más. O sea que, siempre evito el tener algo serio con ellas porque simplemente yo no soy así, no me gusta estar con una sóla mujer. Y a ellas se los digo: «Tu puedes salir con quien tu quieras y no tienes que estar conmigo por siempre, la fidelidad no existe», suena medio feo, pero depende que como se los digas.
Jamás he sentido algo tan fuerte con una mujer como para proponerle matrimonio, ni siquiera pienso tener hijos. Quiero tener la libertad de salir con varias chicas y tener algo bonito con ellas. Pero lo recalco, yo siempre trato de darles a entender que yo no quiero algo serio con ellas.
Estas son las conclusiones de este doctor, no mías. Y, hay que leerlo a fondo, él encontró en hombres liberales, en una media de ellos, que su CI era mayor. Simple
Ya tenía rato de no pararme por acá, Madame Elsy. Y más rato aún de haber leído artículos completos, algo pasó en mi cabeza y me alejé de este sitio… who knows why… Anyways, pero ahora me interesé por este extraño, extraño post en el que no sé bien qué pensar, hay encontronazos de unas ideas con otras. Sin embargo, creo que ha marcado mi regreso a estos lares para seguir informándome respecto a lo que aquí pasa, jaja.
Saludos, M.E.
Re-bienvenido, jaja, esperamos verte por acá más seguido.
Y lo mismo se aplica al lado masculino.
Saludos
Nooooooooooooo, Nooooooooooooo, la infidelidad no esta relacionada a la evolucion. La sociedad nos ha impuesto ciertas conductas que segun ellos (la Iglesia, Gobierno) son lo mejor para (tenernos controlados) y seamos mejores personas!! La Realidad de la evo. es incierta asi como hay especies que son monogamas asi hay especies #»$%&// llamese poliamor swingers, etc…
Así es, nos han enseñado que debemos ser una especie monógama y se ha vuelto un valor dentro de las relaciones, por lo tanto se convierte en una decisión. Cada quién vive las relaciones como desee, viva la diversidad y así como hay quienes por libre albedrío y con toda fe y deseo conciente deciden ser ‘fieles’ o digamos monógamos por una temporada decidida, habrá quienes vivan de manera plena la poliamoría o las relaciones abiertas. Gran punto.
De tu coment, respeto los principios e ideales de cada quien, aunque considero que es más una cuestión de la implantación de la sociedad (Papa y Mama) que de la religión y del Gobierno (que no puede regular si yo me acuesto con alguíen o no)
Pero pos no son «especies» los monogamos y otra especie los swingers (#epicfail) jjaja
Hola, que tal?
Primero que nada, muchas felicitaciones elsy por tu blog y tu podcast, siempre interesante y educativo, mil gracias por tu esfuerzo.
Acerca del artículo, aparentemente tocó algunas fibras sensibles. Yo en lo personal considero que los datos duros (CI vs Tendencia a la infidelidad) son un punto de partida interesante para teorizar, debatir, e intercambiar puntos de vista. De hecho, en cuanto leí el artículo, lo compartí con mi novio y fue muy interesante la discusión que le siguió (no discusión en el sentido negativo, claro está).
Muy por encima de qué esconden los resultados del estudio del doctor Kanazawa, y de la interpretación que él les da, considero muy sano que estos temas puedan levantar polémica y originar un intercambio de ideas. He aquí, por ejemplo, otro estudio acerca de la infidelidad, abordado desde una perspectiva diferente:
«Sobre infidelidad, un estudio publicado por el Instituto Mexicano de Sexología revela los resultados de un estudio hecho a parejas casadas de la Ciudad de México, San Francisco y Puerto Rico, donde se estudio el comportamiento de cerca de 150 parejas casadas de un promedio de 35 años de edad en 4 rubros considerados como factores de riesgo en la conducta.
“Expectativas no cumplidas” fue el factor con mayor porcentaje de votos en México con 57%. “Problemas de comunicación y factores sociales” obtuvo 19.6%, seguido de “Rasgos de personalidad” con 16.1% y por último “Condiciones ético sociales” con 7.1%.»
Siento que ser fiel o no está ligado al bienestar más que a otra cosa. Salvo algunos casos patológicos, todos buscamos a una persona que nos haga sentir bien (en toda la gama subjetiva que esto puede significar). Los seres humanos cambiamos continuamente y lo que alguna vez fue una elección feliz despues de un tiempo puede no serlo más. Pero como decía Anabel Ochoa, el problema no es que prometamos cosas, el problema es que prometemos cosas imposibles de cumplir. ¿Quien es capaz de asegurar que vivirá 20 años más?, igual al minuto siguiente se puede morir atropellado por un auto al doblar la esquina, sin embargo, sí prometemos que amaremos a alguien «por siempre» y hasta lo firmamos en un papel (¿?) Papel mismo que luego nos hace más dificil tomar la decisión de terminar una relación (como si de por sí no fuera ya devastador), haciéndonos más propensos a la infidelidad, y alimentando un complejo de culpa que no tiene razón de ser; tal como si nos culpáramos de no poder volar como un pajaro, o respirar bajo el agua.
Tal vez sea momento de eliminar ciertas instituciones que ya no funcionan (aquí hablamos del matrimonio, pero seguramente todos tenemos una lista larga de patrones que seguimos repitiendo a lo ****ejo). Si necesitamos cierta «seguridad», ¿porque no crear una especie de «plazo»?, tal como se maneja en las sociedades comerciales. Tras 5, 10, o 15 años, se renueva el contrato entre las dos partes, o no. Sin manipulaciones, chantajes o complejos de culpa. No puede ser que estemos cambiando en un montón de cosas, que no nos haya importado mucho dejar la máquina de escribir cuando estuvo la computadora y la impresora al alcance, pero que nos sea imposible darle evolución a la institución del matrimonio.
Por cierto, no hay que confundir infidelidad con promiscuidad (salvo encontrar otra palabra más adecuada). Infidelidad es tener un compromiso de exclusividad sexual y emocional con una persona y descumplirlo. Promiscuidad es salir con muchas personas sin que por esto se haga compromiso alguno con alguna de éstas.
Saludos!
Mil gracias. La promiscuidad (la cual es subjetiva y depende de múltiples factores ideológicos) es un concepto distinto, ya que no se sujeta a tener o no pareja. Un promiscuo puede ser soltero o casado, acá estamos analizando la exclusividad sexual conciente o por decisión propia la cual podemos llamar (concepto personal) monogamia temporal.
«monogamia temporal», genial, me gusta. Gracias por responder! Abrazos elsy!
Debo de decir que empieza muy bien el articulo, al tratar de acercar a ciertos principios sociales que acuerdan las feminas, peroooo a medio articulo, cambia la tesis del articulo y se va por otro lado. Creó que qdo medio forzado el cambio. Aunque pese a ello dennota ideas muy interesantes.
Sí, a mi también me pareció eso… Sé que la publicidad paga todo esto, pero creo que ya se está extralimitando tipo las telenovelas de Televisa donde lanzan el comercial en el transcurso (no en las pausas) de la «recreativa» telenovela.
Yo en mi cabeza ya había tocado ese punto acerca de la evolución de la monogamía en nuestra especie (en la gran mayoría de los pasos, la supuesta monogamia).
He visto varias parejas tanto en testimonio como diréctamente con una relación abierta, en muchos casos suelen durar más que una relación declarada monógama, o bien siguen vigentes siendo felices, claro está.
Sí creo que nuestra especie es polígama por naturaleza, ser monógamo es antinatura…
PERO, la poligamia, poliamor, relación abierta, llámese como se llame NO es para mi, jeje. Ya acepté este hecho (será mi educación cultural y de familia, supongo) y vivo feliz con él, de hecho la infidelidad es tal vez la única cosa que realmente nunca podré perdonar. Seré muy… fantasiosa al creer y desear que un hombre me sea por siempre fiel (o séase, en el transcurso de la relación) pero prefiero buscar/creer en esa pequeña estadística. Vivir con miedos pendejos no es lo mío, eso no es vivir.
hola elsyy.. me gustan muchos tus podcasts — y este tema-
si q me llego.. es verdad pedimoss mas fideliddad q otra cosas
pèro bueno.. sigue siendo tandificil escoger bienbien a un gran
candidato.. nos basamos mucho en el amor y asii jejee..
yo ya ando abriendo mis ojitoss. saludoss
Elsy,
Tocaste un tema de un solo lado, pero la realidad ya es muy pareja respecto a esta situación, hay mujeres que además de «ser libélulas», tienen un albedrío muy libre. Me gustaría tu opinión a este respecto.