Una de las partes primordiales, vertebrales de la plenitud sexual es tener la seguridad de que una misma o la pareja sólo quedará embarazada cuando así lo planeen ambos. La anticoncepción o control natal me atrevería a decir que es el segundo punto más importante de la plenitud sexual, sólo por debajo de la salud.
Por desgracia muchas pero muchísimas parejas no tienen cubierta esa necesidad primordial en su vida sexual. La dinámica por ende se afecta de manera terrible: mes a mes existe la angustia del posible embarazo, discusiones por ello, presión, el deseo sexual de ambos puede verse MUY afectado, incluso la respuesta sexual. Hay hombres que de plano no logran una erección por el miedo de embarazarla.
Me he topado con parejas que viven verdaderos zafarranchos porque él ya no quiere usar condón y ella no quiere tomar anticonceptivos ya sea por miedos infundados o basados en leyendas urbanas sobre las pastillas, DIU y demás métodos o por cuestiones hasta religiosas. Un amigo mío salía con una chica cristiana ortodoxa y dice que cuando le sugirió que fueran al ginecólogo para que ella tomara la píldora ella le dijo que hacerlo sería como asesinar, como un aborto premeditado (pero eso sí ahí andaba con la pierna suelta). Y cuando él se cansó de tener relaciones de coito interrumpido (porque a ella tampoco le parecía el condón), la cosa se fue al carambas. En fin, lo cierto es que sí hay mucha queja masculina y femenina por el asunto. Es inevitable que muchos citen al machismo en este andar, mismos que dicen que un hombre debe ponerse condón y punto y que pedirle a su chava que use un anticonceptivo es prueba machista. Precisamente la anticoncepción fue parte del movimiento feminista de los años 60, pero en todo hay opiniones. Aún así hay mujeres que se sienten sobajadas cuando ellas son las que tienen que cuidarse.
Yo sólo sé algo, controlar el momento en que YO DESEE quedar embarazada ES MI RESPONSABILIDAD. No pienso dejársela a nadie más, no lo veo como un ‘Claro la fregada soy yo ¿no? Y tú tan contentote, ni maiz, te pones condón desgraciado’. ¿Fregada por qué? Si una marca de pastillas te cae mal, se lo comunicas al ginecólogo y buscan otra opción, está el parche, está el implante, el anillo, hay muchas marcas. Lo hormonal no es lo tuyo porque tienes broncas endocrinológicas, psiquiátricas, etc., ahí está el DIU. Supeditarse al condón cuando ya se es una pareja estable y donde ambos tienen la seguridad de que están sanos no resulta a muchas parejas. Claro, las hay quienes se lo pasan bomba años y años con condón pero no son la gran mayoría. Eso sí, es lo ÚNICO que los puede salvar de enfermedades de transmisión sexual.
Hay que llegar a justos acuerdos. Es algo que no pueden seguir dejando. Hasta la fecha no hay un método anticonceptivo masculino en el mercado a excepción del condón, ni modo. Y nuevamente, ni modo, nos queda a nosotras la tarea –POR NUESTRO PROPIO BIEN- de utilizar un anticonceptivo que nos tenga tranquilas cada mes. No hay más, ¿seguir discutiendo?
¿Han tenido broncas con su pareja por el asunto de que ella se decida a tomar o utilizar un anticonceptivo?
deja se lo envio aun amigo con ese problema
Sí, sí me tocó que le diera miedo tomar pastillas porque la cachaban sus papás, aparte de que iba a engordar y después ya no iba a poder tener hijos cuando quisiera y toda esa serie de mitos estúpidos. La verdad es que yo como hombre si pudiera tomar anticonceptivos, no dudaría en hacerlo, la tranquilidad no tiene precio. Otro tema interesante es cuando ya son parejas estables y uno ya quiere tener hijos y el otro no. Tons tb ahí empiezan con las clásicas de agujerar el condón o cambiar las pastillas anticonceptivas or tic tacs y toda esa sarta de cosas que, aunque se escuchen novelezcas, pasan en la vida real.
Mmm el ginecólogo me recetó pastillas, pues dijo que si las usaba junto con el condón tendríamos el deseado 100% de seguridad. Pero la verdad es que usar hormonas no me pareció la mejor idea, y mi novio estuvo de acuerdo en que si no estaba convencida, no las usara. Así que llevamos casi 3 años sólo con condón y hasta ahora ha funcionado muy bien. Sólo he tenido un susto por un retraso, que a la fecha no sé porqué sucedió. Igual y pronto me animo a las pastillas, porque no quiero por ningún motivo una sospresa ja!
Con mi pareja decidimos dejar el condón.
Pues yo empecé tomando pastillas, que me resultaron la cosa más incómoda por eso de tomarlas diario.
Luego cambié al parche que fue una maravilla. Después por prescripción médica me prohibieron anticonceptivos hormonales y ni modo, cambié al DIU.
Al principio me daba miedo que me lo pusieran, por eso de los mitos, pero ha resultado bien. El único problema es que a mi no me daban cólicos y ahora si, no es terrible pero se siente bien raro. Y el periodo es más abundante.
En fin, lo que tiene que pasar una, espero que pronto los hombres también tengan varias opciones a elegir.
Pues mi esposa y yo cuando eramos novios si le llegamos buen rato al condon ya que ella en serio es bien dificil encontrarle anticonceptivos casi todos los metodos hormonales le causaron efectos secundarios indeseados el DIU se le encarno en el cuello del utero y despues estuvo mas traumatica la sacada de DIU decidimos tener familia he hicimos un pacto despues de tener a nuestro tercer hijo, si nace por cesarea te haces salpingo, si nace normal yo me hago vasectomia, fue normal asi que yo me hice la vasectomia, solo puedo comentar de despues de eso puro placer y coger cuando se antoja sin ningun pedo.
pues primero keria k se la metiera sin condon y lueg empezaba a bociferar q no keria tomar la postday.. esas si son mamadas señores
Uhmm… Eso creo que es cuestión de que los dos se pongan de acuerdo. No es si una queda embarazada o el otro no quiere usar condón sólo porque no. Comunicación.
@el wero
Jajaja a ti te pasan y dices unas cosas! XD
Hola Gran Tertulia,
………………… Me parece que aunque las mujeres son las responsables de sus cuerpos, ciento por ciento, los hombres debemos de cuidar de la felicidad propia del presente, del engorro de niños accidentales del futuro y de mujeres que usan a esos niños como rehenes para controlarnos y saquearnos. Principalmente no es justo para esos niños, y no es justo para nosotros mismos. La única salvación totalmente efectiva para los hombres es la vasectomía. Morfa cuenta como llego a su decisión, y realmente no hay nada mejor. Doy fe. ‘La vida es como es; no como debería de ser’, y nunca se sabe de qué rincón salta un par de ojos moros, irresistibles y deliciosos que presentan la aventura a la mano. Así funciona, no importa que seamos casados, viudos, solteros o divorciados; tampoco que sean casadas, viudas, solteras o divorciadas, simplemente somos humanos. La fantasía de la fidelidad es eso, fantasía, tal vez muy romántico, pero imposible de asegurarse o controlarse, aunque se trate del Presidente Clinton, el cura director del coro, o Rodrigo Borgia, alias Papa Alejandro VI, padre y amante de su hija Lucrecia, quien también quiso muchísimo a su hermano Cesar. Así es.
.
…… Ya antes, había escrito acerca de la vasectomía y también había presentado la siguiente anécdota personal; me parece el momento justo para presentarla de nuevo.
.
……Estuve casado con María Lejandra, de quien yo creía estar locamente enamorado, pero sin saber que las hormonas sexuales causan locura temporal y selectiva. Con la chica teníamos el pacto de no tener hijos sino hasta ser dueños de la casa donde crearíamos a los niños. A los tres años, unilateralmente ella decidió descontinuar el tratamiento anticonceptivo y sin mencionarlo, pero me di cuenta casualmente que no había tomado cinco pastillas del ciclo, y yo sabía que ella era muy precisa con los medicamentos como para olvidar algo así. Cuando me di cuenta, estaba en el baño a punto de tomar la ducha, entré a la bañera y cerré el cristal. En un momento de lucidez destellante, decidí no salir del agua sino hasta tener el plan completo de lo que debería de hacer porque esa decisión tendría repercusiones emocionales y económicas el resto de mi vida, y de cualquier manera, mis planes tan preciados se corromperían por esta manipulación sorpresiva de mi amada. Abrí el chorro, y recordé la panacea universal para la felicidad, “Serenidad para aceptar todo aquello que no se puede cambiar, valor para cambiar lo que sí se puede, y sabiduría para reconocer la diferencia”. A mi esposa la conocía desde la niñez, y yo pretendí modificar su carácter, pero mientras jugaba con el jabón, reconocí lo irrespetuoso que es pretender cambiar a alguien porque a mí no me gusto que ella pretendiera cambiar mis planes con esa manipulación, y también, me di cuenta perfectamente de lo imposible que eso es. Contra mi propia voluntad, yo había aceptado tener hijos para complacerla, pero, hasta entonces, me di cuenta que yo no me estaba complaciendo a sí mismo y que eso sería un sacrifico mortal para mi felicidad. También pensé en el pleito que se aproximaba al confrontarla con las pastillas, y sabía que esa contienda yo la tenía que ganar para obligarla a que se tomara las pastillas juntas, de acuerdo con las instrucciones del medicamento. Mientras me afeitaba, Lejandra entro al baño, con mi camiseta puesta como salto de cama y el cabello enmarañado, se veía adorable, me ofreció café y volvió a la cocina. Mientras tanto, decidí ganar el pleito de la mejor manera, sin pelear. Cuando regresó con un tarro de café en cada mano, se puso enfrente de mí, se paró muy rectecita, sacando mucho el pecho hermoso y post adolescente, y con su mejor sonrisa dijo, “¿Tarro o teta?” Jamás se me había presentado oportunidad más grande para pelear sucio. Lejandra era glotona y adicta al dolor, especialmente por los pezones, la tome por las tetas delicadamente y en los labios le planté el beso más sensual y tierno que tengo para las ocasiones especiales, ji, ji, ji; y la puse contra la pared. Cuando ella trato de pedir tregua para asentar los tarros, con la rodilla atosigué la púbera y empecé a castigar los pezones. De pronto empezó a temblar de los brazos y a derramar el café, abrí los ojos y vi el torrente de lágrimas que vertía. Despacito cesé el ataque, y le recibí los tarros, los puse sobre el mostrador y continué besándola. Ella pedía guerra, dulcemente acariciando el emblema varonil. Tomé una toalla doblada, la puse sobre el retrete y con un ademan la invite a sentarse, Lejandra me vio con ojos pícaros, sonrió muy bonito y dijo con diablura, “¿Te gustaría que, primero, bebiera del café caliente?” Me sonreí ampliamente y con dulzura sobre la máscara hipócrita y respondí, “¡Si…! Y al mismo tiempo, tómate estas pastillitas que se te olvidaron”. Sorprendida me dio un vistazo a los ojos y dijo “Y sí… sí claro, me había olvidado”.
.
……Esa batalla la gane de la manera más linda e impunemente, con retrechería y vulgaridad de la más hermosa, y al final fui premiado amorosamente…
.
……Esa misma mañana hice cita con el urólogo, y unos días después fui vaséctomizado como dios manda y sin participarle a mi amada. Lejandra quedó muy sorprendida al darse cuenta, y nunca pudo aceptar que había perdido ochenta y dos por ciento de mi amor y ciento por ciento de mi confianza.
.
…… Esta anécdota es la decisión mejor ejecutada de toda mi vida. De estos sucesos ya hace más de treinta años y dos afortunadas esposas más…
.
………………… Saludos,
.
……………………………………………… Pácimo
Es verdad, muchas mujeres quieren embarazarse para amarrar marido o eso creen… pero que tal cuando es él que quiere hijos y tu no? yo he tenido que empezar a tomar la pastilla porque el quiere que me embarace y se hace al que se le olvida el condón…
Mi pareja y yo desde el principio usamos condón y es un acuerdo al que hemos llegado; es un mito eso de que no se disfruta igual, nuestros encuentros siempre han sido maravillosos, nada de que no tiene erección o que no llegamos al orgasmo, al contrario. Estamos siendo responsables y disfrutamos de nuestro momento a más no poder.
Mi novia y yo decidimos usar pastillas y parches. Al principio no quería ir al ginecológo porque le daba pena decirle a sus papás así que usabamos puro condon, pero después de una horrible experiencia que pasamos tuvo que ir al ginecológo y él ya le habló bien de los metódos y accedió a pastillas o parches. El problema que teníamos con el condon es que no siempre teníamos cuando nos agarraba la calentura y a veces la oportunidad se presenta cuando menos te lo esperas y aunque el 90% del tiempo traía condones por si acaso. Pero ese 10% de las veces en que no traía condon resultó en un embarazo (posteriormente todo se arregló y abortó de una manera muy segura que no tuvo complicaciones con unas pastillas que le dio el ginecológo, fue posible ya que acudió al ginecológo en poco tiempo). Ojalá que si alguien lee esto, tome en cuenta esa desventaja del condon, ya que las pastillas post-day no se pueden usar siempre (creo que es una vez cada 6 meses o algo así) y que no pase por lo que yo pasé.
sin lugar a dudas un tema delicado, podra existir entre la pareja mucho amor o mucha caalentura pero mas cvale prevenir que bautizar, en caso de que se les haya chispoteado y ya esten con el embarazo y el caso de la pastilla del dia despues ya no sea aplicable, ahora bien si en la pareja solo es uno el que quiere niños y el otro no entonces si va arder troya porque por esta causa ha habido muchos truenes en las relaciones o matrimonios a huevo que al final de cuentas todos pierden porque la relacion de pareja ya se ve fracturada y por ende no se le va a otorgar la atencion debida a los niños en cuestion asi que mejor hay que sentarse a platricar y llegar a un acuerdo mutuo y si no seda pues ni modo a seguir con nuestras vidas cada quien por su lado
me gusto!!
Es muy importante aclarar que los anticonceptivos y dentro de este grupo los hormonales no son abortivos. Funcionan haciendo el moco cervical más espeso, e inhibiendo la ovulación, al no tener ovulación no hay una fertilización por lo tanto no hay un embarazo, así que estos miedos son mal infundados por pobres conocimientos acerca del tema. Es importante cuidarse y con una buena educación sexual, hay una vida sexual sana como consecuencia.
Realmente me parece vergonzoso el comentario del que se hace llamar Pacimo. el tendrá su opinión y habrá tomado la decisión que le pareció mejor, pero no se que hombre que se considere como tal anda contando públicamente episodios tan íntimos de la que fuera su pareja y que según él en algún momento amó. Una anécdota como esa puede resumirse para como se dice, no afectar a los implicados, pero el ejemplo que se ve aquí no es más que una clara representación de su machismo al querer quedar como muy listo y muy macho humillando a la mujer que en algún momento le amo como para desear tener hijos suyos. No se justifican las acciones de la chica, pero aun así toda mujer merece respeto, consideremos en cada acción que involucre a una dama, que todos tuvimos una mujer por madre y si nos gustaría que cualquier tipo la tratara o se refiriera a ella como estamos a punto de hacerlo.
Recordemos que el sexo conlleva responsabilidades, no es solo gozar y ya, también reflexionemos que la vida no es siempre lo que uno quiere, aun cuando te cuides mucho y uses todos los métodos anticonceptivos que quieras, no falta el caso excepcional en el que la vida se abre paso y todos debemos estar preparados para afrontar una situación así y hacernos responsables de nuestras acciones. Señores, muestren con su ejemplo que no todos los hombres somos unos patanes y que muchos de nosotros si tenemos sentido de la responsabilidad, sensibilidad y educación.